Este artículo, dedicado a estas cuatro grandes compositoras de música electroacústica del panorama actual español. La investigación llevada a cabo acerca de este estilo musical desde sus comienzos hasta nuestros días ha sido gratificante, aunque breve, pero sobre todo llevadera por la gran ayuda de cada una de ellas. Sus ganas de dar a conocer este estilo musical a través del género femenino, su pasión, su humildad, generosidad, paciencia, han dado lugar a este trabajo realizado para finalizar la investigación de un máster musical. De ahí, que aquí se den unos pequeños ápices del mismo para que se tenga conocimiento de que, poco a poco, se está dando luz a este tema tan importante.
Por un lado, se expone la parte biográfica más destacable de cada una de ellas, que se pueden encontrar en sus páginas webs o blogs, e incluso con el contacto directo, que hace más cercana la historia personal e individual.
Por otro lado, se han realizado los análisis de dos piezas de cada compositora desde un punto de vista formal, su estructura, y material, cómo está tratado y manejado.
Las piezas son las siguientes:
- Anna Bofill: Alter-Alterae, obra acusmática.
- Anna Bofill: Espai Sonor, obra mixta.
- Inmaculada Cárdenas: Museo, obra acusmática.
- Inmaculada Cárdenas: La Línea – La Habana, obra acusmática.
- Marisa Manchado: Voix, obra acusmática.
- Marisa Manchado: Silencio 3, obra mixta.
- Diana Pérez Custodio: Juguetes del viento, obra acusmática.
- Diana Pérez Custodio: Tres círculos viciosos en un ojo de pez, obra mixta.
A continuación, se describe un breve análisis de cada una de las piezas:
Espai Sonor
Es la primera obra de electroacústica mixta compuesta por la compositora. La realiza en el año 1976, mismo año de su estreno, un 16 de octubre, en el Festival de Música de Barcelona celebrado en la Fundación Miró. Es una obra que se puede dividir en dos partes importantes. La primera de ellas encierra un conjunto de percusión formado por instrumentos de piel, madera y metal, los cuales están sobre la grabación de sonidos obtenidos por un sintetizador. La segunda parte es un diálogo a cuatro voces proveniente del Stokos. Bofill utiliza el Stokos IV para producir sonidos a registros estables e intervalos iguales, o bien para la continuidad de notas y ritmos al azar.
ESTRUCTURA
A: cc. 1 al 75 + cinta sola + crótalos + cinta y final redoble platillos. (Percusió A)
a: cc. 1 al 24 (12+12), b: cc. 25 al 48 (12+12), c: cc. 48 al 75
B: Percusió B
Alter – Alterae
Obra electroacústica cuyo estreno se sitúa el 21 de abril de 2016 para el Festival Mixtur en Barcelona. Existe en versión octofónica, cuadrafónica y estereofónica. El siguiente análisis se basa en la versión estereofónica. La obra está basada en el siguiente poema de María Cinta Montagut Sancho de su poemario Ceniza.
“Llegan los barcos hasta el puerto,
cortan las olas con sus cascos de acero
y acumulan la luz en sus cubiertas
para hacernos saber que hay otros mundos
y otras maneras de habitar la tierra.
Sorprende la belleza de los barcos
como sorprende una mirada limpia
en la profunda oscuridad de este presente”.
Según la propia autora, este poema le sugirió realizar un homenaje a “l@s Otr@s”, a la “otredad”. La pieza se puede dividir en cinco partes que corresponden a diferentes climas que ella misma observa dentro del poema. A cada sección le ofrece un nombre como concepto para la realización del trabajo. También indica que está trabajada con la aplicación Max – Msp de generación de sonidos donde buscar crear fenómenos aleatorios a partir de células acústicas trabajadas por la síntesis sonora, además de sonidos y ruidos domésticos grabados y manipulados.
Museo
Obra creada en el LIEM – CDMC en Madrid, en la época donde la compositora empieza su creación musical individual. Está dedicada al Museo de Arte Contemporáneo Reina Sofía en Madrid, aunque cuando se compuso era Centro de Arte Contemporáneo. Todos los sonidos de la obra fueron grabados por la compositora en el Reina Sofía, apoyándose en las exposiciones temporales que había en aquellos momentos para realizar las improvisaciones que fueron el material básico con el que posteriormente se realizó la obra. Se estrena en el año 1995, en una noche de verano del Patio del Reina Sofía. Por influencia y ayuda del propio compositor electroacústico Adolfo Núñez. En dicho estreno utilizan una iluminación para así focalizar la atención del público a la obra. Más adelante vuelve a estrenarse en el Museo Provincial de Arte de Lugo con representación coreográfica de Juan Moredo, y bailada por Alba Barral y Juan Carlos Zahera.
La obra Museo se divide en tres grande partes:
- Parte “O Museo”
- Parte “A Historia”
- Parte “A Obra”
Respecto a la grabación de los sonidos que imitan a los patos y otros a jugar con pelotas de ping pong, la compositora los grabó improvisando gracias a la inspiración que le produjo Los Patos del Buen Retiro, los cuales son unos cuadros inmensos de Julián Schanbel colocados en las salas del Reina Sofía.
La obra está dividida en tres partes para hacer un guiño a la música clásica. Respecto al texto que inicia cada una de las partes se encuentra en diferentes tiempos verbales. Primero en presente, después en pasado y para terminar en futuro. La primera parte que es el presente relata elementos del museo, de las salas. La segunda parte es el pasado, por lo que la compositora estuvo recabando información acerca del edificio y de la anécdota del fantasma del museo. Por último, la tercera parte es el futuro, donde toma conciencia de la conexión del individuo y una obra de arte.
La Línea – La Habana
Esta grabación de la obra electroacústica también pertenece a “25 años de arte sonoro y pedagogía en Lugo”. Es realizada gracias a la grabación de sonidos en las dos ciudades que dan nombre a la obra, por un lado, La Línea (Cádiz), por otro lado, La Habana (Cuba).
Es compuesta en el LIEM de Madrid y estrenada por primera vez en el Centro de Arte Reina Sofía en 2003. La realización de añadir video a la obra es realizado por Antón Caeiro, utilizando fotos de Santiago Cano. Para llegar a mostrar la atmósfera de ambas ciudades, trabaja los sonidos a través del ordenador. Por último, un poema escrito por la propia autora es el que utiliza para el inicio, dándole voz al mismo la pianista y locutora Ana Vega Toscano.
La voz juega un papel importante ya que transmite palabras salidas del corazón de la autora. Se observa cómo influyen sentimentalmente ambas ciudades en la trayectoria de su vida.
“Mi Línea, La Línea de mis recuerdos, la encontré en La Habana, Habana, mi Habana, o estoy en Cádiz, en mi Cádiz, o es La Habana. En ese mar donde las dos se dan la cara, ¡ay la luz!, ¡ay la gracia!, ¡ay el lamento de mi Línea o de La Habana!, ¡ay ese mar en el que ellas se miran cara a cara! (texto propio de la autora).
Voix
Obra compuesta para cinta sola y llevada a cabo a raíz de la voz de la compositora. Su estreno se realiza en el Salón de Actos del Museo de Arte Contemporáneo Reina Sofía de Madrid, el día 28 de junio de 1999, a lo largo de las Jornadas de Música Electroacústica de Madrid, que fueron organizadas por el L.I.E.M – C.D.M.C., del Ministerio de Cultura Español. Es grabado por Radio Nacional de España.
Silencio 3
Obra para saxofón soprano y contralto –solo un ejecutante- y cinta. Está dedicada al saxofonista Francisco Martínez y estrenada en el IV Festival de Música Electroacústica “Punto de Encuentro” organizado por la AMEE el 16 de diciembre de 1995 en Madrid en Sala Manuel de Falla del Palacio Longoria, sede SGAE. (Manchado, 2021). La escucha de la obra se puede realizar a través de la grabación realizada por RNE, existente en la propia web de la compositora. Ella la compuso en su estancia en Roma y la cinta en el LIEM – CDMC.
Tras una conversación con Marisa Manchado expone que Francisco Martínez es el intérprete que le propone la obra. Actualmente la interpreta para saxofón soprano y alto, aunque su origen es alto y barítono, de sólo un intérprete. Además, indica que la cinta está elaborada con materiales acústicos pregrabados al propio Martínez.
Juguetes del viento
Obra compuesta en el año 2009, la compositora se la dedica a su hija Candela, además de homenajear a César Manrique. Ella misma aclara quien es el susodicho.
César Manrique fue un creador especialmente comprometido con la desintegración de las incómodas barreras que a menudo se han establecido entre el arte y la naturaleza. Un buen ejemplo de ello son las piezas escultóricas de su serie bautizada como juguetes del viento, muchas de las cuales se encuentran en Lanzarote, su isla natal. Si se contemplan fijamente, su movimiento, cíclico pero a la vez ligeramente cambiante según las fluctuaciones del aire, produce un efecto hipnótico. Mi obra musical se basa en la elaboración de las experiencias poéticas resultantes de permanecer absorta un buen rato delante de cinco de estas esculturas. (Pérez, 2020).
El estreno se realiza el 3 de diciembre de 2009, en la Sala Manuel de Falla de la SGAE en Madrid. El concierto fue inscrito en el marco del XVI Festival Internacional de Música Electroacústica Punto de Encuentro.
Por otro lado, la inspiración de la compositora viene en relación a la experiencia directa frente a las esculturas, captar a través de todos los sentidos elementos como los matices de la luz, los sonidos, etc., los cuales no son posibles de transmitir por palabras. A través de la siguiente foto, donde salen cinco juguetes escogidos por ella misma, se ve que son una de las fuentes de su inspiración.
Ilustración 1 Juguetes del viento
La propia compositora indica que la estructura es sencilla y mecánica, además de haber tenido tres fuentes de inspiración. La primera son los cinco elementos de la fotografía, la segunda, es una sección de estrechos entre ellos, y por último, una superposición de los elementos dando lugar a un gran sonido heterogéneo donde cada elemento termina trascendiendo.
Tres círculos viciosos en un ojo de pez
Obra para soprano y cinta, versión I, data del año 1994. El estreno de la misma se produce el 9 de noviembre de ese mismo año, en el Salón de Actos de la U.I.M.P. de Cuenca. El concierto fue inscrito en el marco del IV Seminario Internacional sobre Música y Ordenadores.
En el programa de ese mismo concierto, la autora deja unas palabras a sus oyentes.
Miras tu reflejo deformado en el fondo de una taza y quisieras reaccionar.
“Ya no puedes ocultarlo por más tiempo, todos los altavoces lo están gritando. ¡Es tu cuerpo!”.
Harías algo si no fuera porque la espiral te está arrastrando de nuevo,
otra vez hasta el centro de tu ombligo.
A través de la obra quiere dar a conocer la cara menos reflexiva de la humanidad. Para ello trabaja en los pecados capitales como la gula, la lujuria y la ira. Al buscar un soporte que le permitiera realizar su idea de bucle, es decir, de circularidad, dio lugar al concepto de ojo de pez. De ahí el nombre de su obra Tres círculos viciosos en un ojo de pez. Para la composición de la obra utiliza sonidos fisiológicos en crudo, no utiliza ningún tipo de manipulación, aunque más adelante se observará que existe una gran reverberación en numerosas ocasiones. A través del trabajo de estos elementos, la compositora busca que la protagonista muestre la realidad física que ella no mostraría en sociedad.
Tras este pequeño inciso en cada una de las obras, se sigue indagando a través de entrevistas personales e individuales ciertos aspectos de la música electroacústica en pleno siglo XXI. Finalmente se llega a una conclusión, aunque todavía queda mucho por descubrir de este ámbito electroacústico femenino, y no sólo de ello, sino de las cuatro compositoras aquí descritas.
Cualquiera que desee saber más acerca de esta investigación, puede escribir al siguiente correo: claudiacomposer@gmail.com
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